-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------“El libro es como la cuchara, el martillo, la rueda, las tijeras. Una vez se han inventado, no se puede hacer nada mejor. El libro ha superado la prueba del tiempo... Quizá evolucionen sus componentes, quizá sus páginas dejen de ser de papel, pero seguirá siendo lo que es.”

UMBERTO ECO

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viernes, 20 de agosto de 2010

EVALUACIÓN DE LA COMUNIDAD: Parte esencial de las herramientas del bibliotecario referencista. (2ª parte)

¿Qué es la evaluación de la comunidad?   
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La evaluación de la comunidad es un proceso que identifica la población a la que sirve la biblioteca, sus características socioeconómicas, necesidades bibliotecarias y de información, y los patrones de uso de la biblioteca.
También identifica a los Stakeholders o guardianes (responsables de la financiación y la vigilancia de la biblioteca) y a los clientes (usuarios) potenciales de la biblioteca.

En resumen, significa dirigir los servicios y los recursos teniendo en cuenta las necesidades de la comunidad. La evaluación de la comunidad también ayuda a asegurar que los objetivos y la misión de la biblioteca concuerden con las necesidades de la comunidad y las expectativas de los guardianes.


¿Por qué evaluar la comunidad?

La información está cambiando rápidamente, cada vez más gente tiene acceso a Internet que cada vez tiene motores de búsqueda más potentes y de más contenido. Muchas bibliotecas académicas, por ejemplo, advierten del continuo descenso del número de consultas de referencia y del uso de colecciones impresas. En un momento de presupuestos limitados o reducidos, el margen para tomar buenas decisiones en la provisión de servicios y recursos bibliotecarios es cada vez más estrecho.

Los servicios y las actividades de la biblioteca deben ser vistos desde el punto de vista de los clientes, dejando que éstos determinen la calidad en función de la satisfacción de sus necesidades. Los bibliotecarios deben asegurarse de que su trabajo, actividades y tareas, aportan valor añadido al cliente. Aunque este concepto centrado en el cliente sea nuevo para las bibliotecas, es un estándar en el mundo de los negocios.

Los bibliotecarios de referencia están en una posición privilegiada para participar en la evaluación de la comunidad. Trabajan directamente con ésta, en persona o a distancia, y conocen de primera mano las necesidades del cliente, los recursos bibliotecarios (impresos o en línea) que se necesitan para apoyarlo, así como las barreras y los obstáculos a los que se tiene que enfrentar la comunidad en la utilización efectiva de las bibliotecas.

Extracto

Ver artículo completo en:
www.ifla.org/IV/ifla70/papers/029s_trans-Hiller_Schillie_Self.pdf

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